"Estamos enterradas entre papeles". Así describe Rocío Contreras, la presidenta del Colegio de Trabajo Social de Badajoz, la situación de estos profesionales en Extremadura.
Señala que asumen tareas administrativas que nos les corresponden mientras no se reconoce su verdadera labor. "No somos gestores de recursos", sentencia.
Defiende un incremento de profesionales, pero también mejores condiciones laborales y la unificación de criterios en las distintas administraciones. Demandas que han planteado recientemente a la directora general de Servicios Sociales.
