Badajoz sabía que la ocasión era de las grandes. Más de trece mil personas se daban cita en el Nuevo Vivero para un partido en el que los blanquinegros solo podían permitirse un objetivo: ganar. Y con esa intención salía un Badajoz que en los primeros minutos lograba avasallar a un Pontevedra ya descendido. Los de David Tenorio comenzaban a acechar el área gallega, contando Carlos Calderón con una de las ocasiones más claras. Sin embargo, los visitantes conseguían imponer su ritmo, y los extremeños se veían cada vez más incapaces de generar peligro e incluso, por momentos, de hacerse con la pelota.
Algo que pudo corregir el Badajoz tras el descanso. Los blanquinegros salían de nuevo a morder y comenzaban a acumular acercamientos para abrir el marcador. Adilson y Gorka estarían muy cerca de ver puerta, pero era finalmente Ferrón quien aprovechaba un error de salida del guardameta visitante para hacer un gol que bien puede significar la permanencia. Con esta victoria y con el empate del Fuenlabrada ante el Real Madrid Castilla, el Badajoz llegará a la última jornada dependiendo de sí mismo para salvarse. La finalísima, el próximo sábado ante el Córdoba en El Arcángel.
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