A mitad del siglo XX no había ninguna zona de Extremadura que estuviera dentro de lo que los expertos llaman clima árido. Hoy, tres cuartas partes de la provincia de Badajoz lo sufre. Esto es debido a dos circunstancias: el descenso de las precipitaciones y el aumento de la temperatura. De todo esto hemos hablado hoy con David López-Rey y con Rubén del Campo, portavoz de la AEMET, que reconoce que "los climas áridos van ganando terreno en la península" y que lo hace de forma "silenciosa pero constante"
