Badajoz ha recordado este 6 de noviembre la tragedia que segó la vida de 22 personas en la ciudad y tres en Valverde de Leganés. Ha sido un día de homenaje y, sobre todo, de recuerdos de quienes lo vivieron en primera persona, o quienes han querido acompañar a sus paisanos.
Con una homilía, oficiada por el arzobispo de Mérida-Badajoz, Celso Morga, se ha recordado a quienes perdieron la vida aquella fatídica madrugada del 6 de noviembre. En la parroquia de San José Obrero, que se levantó después de la riada, su coro ha participado en la eucaristía.
Y, con un acto sencillo, nombrando uno a uno, a los 25 nombres que desaparecieron bajo el agua, 22 de Badajoz y 3 de Valverde, en cuyas macetas permanecerá sembrada en la tierra la memoria de todo un barrio, el Cerro de Reyes. Un acto emotivo ante las autoridades de entonces, y las de ahora.
La solidaridad de la gente de este barrio fue clave, no solo aquel día, sino después. La mañana ha terminado con una procesión, con Nuestra Señora Dulce Nombre de María, recorriendo las calles del barrio, portada por sus vecinos.
"Un caudal inmenso de solidaridad"
El presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, ha asistido al acto de homenaje a las víctimas de la riada. En su intervención, Fernández Vara, ha destacado que "lo más importante de todo, fue que una barriada, una ciudad, una región, tan duramente golpeada por una tragedia se tornó en un caudal inmenso de solidaridad"
Por su parte, el alcalde de Badajoz, Ignacio Gragera, ha recordado que hace "25 años el agua nos deparó una noche de sueños destruidos, una noche nefasta y llena de tragedia pero que merece estar en nuestro recuerdo y a cuyos protagonistas debemos todos nuestros respetos".
