Suben las temperaturas y ya apetece darse un chapuzón, pero en el caso de las piscinas naturales del norte de Extremadura habrá que esperar hasta mediados de junio, cuando pase la primavera y no haya riesgos de tormentas, explica el alcalde de Jerte y presidente de la mancomunidad, Gabriel Iglesias: "Suelen abrirse sobre esas fechas porque en el mes de mayo puede haber tormentas y por eso están cerradas las piscinas naturales".
La fecha oficial de baño en estas piscinas naturales deben acordarla ahora todos los alcaldes de los municipios que cuentan con piscinas naturales, asegura Iglesias. No obstante, en muchos de ellos comenzarán durante los próximos días los trabajos de acondicionamiento. En cuanto al baño en las gargantas naturales, como es el caso de Los Pilones en la Reserva Natural de la Garganta de los Infiernos, explica que, pese a estar permitido, no es "aconsejable porque el agua esta muy fría".

Mientras, en la comarca de La Vera, la Diputación de Cáceres ya trabaja junto con la Confederación Hidrográfica del Tajo y la Dirección General de Transición Ecológica y Sostenibilidad en la elaboración de un plan para regularizar las zonas de baño y acondicionarlas. En la ejecución de dicho plan se invertirán cuatro millones de euros durante los próximos tres años. "Serán inversiones en acondicionamiento o accesibilidad en todos los pueblos que tienen zonas de baño naturales, desde Madrigal hasta Aldeanueva, pasando por Jarandilla o Losar", explica María Dolores Domínguez, presidenta de la Mancomunidad de la Vera.
"Viene mucha gente a nuestros municipios y las piscinas son un apoyo más para el sector turístico"
Con estas inversiones se busca, además, mejorar el atractivo turístico de las piscinas naturales de estos municipios, piscinas que cada verano atraen a cientos de visitantes. "Viene mucha gente a nuestros municipios y las piscinas son un apoyo más para el sector turístico", señala Iglesias. Mientras, Domínguez afirma que "a partir de la primavera se nota un mayor número de visitantes en La Vera". Las piscinas naturales contribuyen también a la dinamización de la economía de estas localidades durante el verano.