Hoy vamos a destacar a mujeres científicas. Se trata de poner en valor a mujeres referentes para niñas y niños en la ciencia. Comenzamos con Hedy Lamarr: Seguro que les suena, fue Dalila en Sansón y Dalila, lo que seguramente no sepan es que era ingeniera e inventó la tecnología precursora del wifi.

Otra mujer, Ada Lovelace en el siglo 19, fue la primera programadora del mundo.

La superfibra que utilizamos ahora en los chalecos antibalas o en tecnología espacial la inventó otra mujer, Sthephani Kwolek.

Y puede que tampoco hayan oído hablar de Rosalind Franklin, prácticamente desconocida a pesar de sus contribuciones sobre la estructura del ADN.

Muchos nombres femeninos y muchas contribuciones a la ciencia que están invisibilizadas aún. En esa labor de sacarlas a la luz y convertirlas en referentes para las nuevas generaciones está la asociación Bioquímica en Movimiento, un grupo de estudiantes de la Universidad de Extremadura que esta semana, la de la mujer y la niña en la ciencia, la emplean en esta tarea, dando a conocer a las mujeres científicas en centros escolares.
Apenas aparecen en los libros de texto
Laura Casablanca, miembro de la asociación, nos ha contado que sacar a la luz a estas profesionales es una labor necesaria porque apenas aparecen en los libros de texto. Sin embargo, se están dando algunos pasos adelante y se nota en las charlas que ofrecen donde, dice David Garrido presidente de la Asociación, se encuentran a niños y niñas que conocen a científicas que a veces ni ellos han visto y eso es labor del profesorado implicado en mostrarlas.
El día de la mujer y la niña en la ciencia se celebra cada 11 de febrero.