El almendralejense Pedro Hierro se encuentra inmerso en cumplir con su cuarto reto solidario. El pasado viernes partió en bici con el objetivo de recorrer los 1000 kilómetros que separan los Pirineos franceses de Almendralejo.

Hoy nos ha atendido en directo desde Santo Domingo de la Calzada (La Rioja), donde se encuentra tras finalizar su tercera etapa. "Hoy ha sido una etapa cortita, de 50km, pero ha tenido su punto de dureza por un problema que he tenido en una de las mochilas", nos cuenta. Mañana le espera la cuarta etapa con un total de 80km y unos 600 metros de desnivel hasta llegar a Burgos.

El dinero recaudado durante el reto irá destinado a 'Afisuextrem', una asociación dedicada a cubrir las necesidades de fisura labial y labio leporino que tienen los más pequeños. El próximo domingo 9 de julio tiene previsto finalizar el desafío con su llegada a la capital de Tierra de Barros.

Se dice que es una de las grandes promesas de nuestro atletismo. Pero lo cierto es que David García Zurita ya es toda una realidad. Su palmarés, su camino, lo ha demostrado. Su última parada, el récord de Extremadura en 400 metros lisos. Fue el pasado miércoles con un tiempo de 46'12 segundos en el trofeo Diputación de Cáceres. Tiene solo 18 años, es internacional con España y no para de pulverizar marcas.

Hoy nos hemos llevado a David García Zurita a lo más alto de su ciudad, de Badajoz. Paseando por la Plaza Alta y la Alcazaba hemos hablado con él de atletismo, de sus sueños y también de cómo es su día a día, el día a día de un joven de 18 años que se prepara para convertirse en uno de los grandes de nuestro atletismo. García Zurita ha finalizado el bachillerato y el próximo año iniciará sus estudios en Marketing y Dirección Comercial. 

Detrás de tantos éxitos y sacrificio hay una persona "referente" para él, su entrenador, Luis Carretero. "Él me ha cogido y me ha llevado a donde estoy ahora", señala el joven atleta. De la mano de Luis, García Zurita dibuja en su mente el sueño de, algún día, convertirse en atleta olímpico. Pase lo que pase, prosigue su camino. Uno que arranca en Badajoz y que promete llevarle a sitios inolvidables.