Las obras del regadío de Monterrubio de la Serena transformarán 1200 hectáreas de secano en regadío por goteo. El 85% de esta superficie está dedicada al olivar, siendo el resto tierras arables, de almendro y viñedo. El objetivo de las actuaciones es dar agua de apoyo a los cultivos y posibilitar su mantenimiento en la zona. El abastecimiento se hará a través de dos balsas, la principal de ellas (Hatillo) ocupa una superficie de 25 hectáreas y posee una capacidad de 1,8 hectómetros cúbicos, lo que la convierte en la segunda impermeabilizada más grande de España. Se prevé que las actuaciones culminen en enero de 2024

También conocido como Salto del Alavea, el Chorrerón del Tajo está situado en el municipio hurdano de Caminomorisco. Desde su mirador podremos contemplar el espectacular salto de agua del río de 44 metros. El acceso se realiza desde la pista forestal, a la izquierda de la carretera que une Pinofranqueado y Caminomorisco, tomando la vereda que nace junto a un pilón de agua. La ruta se puede realizar a pie hasta el mirador.

El equipo de Cazadores de Lances, vuelve a las cumbres de la cara norte de Gredos, acompañando a extranjeros para cazar a rececho las cabras monteses. Y terminamos en suelo extremeño, donde cazadores reconocidos y de altísimo nivel, buscaran con sus setter las pitorras o becadas entre encinas y retamas.

La caza menor con perro a nivel competitivo es una prueba deportiva de ámbito nacional que tiene por objeto premiar al cazador, que demuestre las necesarias condiciones físicas y habilidad cinegética en el ejercicio de la caza.

Esta prueba debe tener una organización y una serie de características que se deben cumplir como por ejemplo la elección del terreno a cazar, que debe estar permitida la actividad cinegética de caza menor, las armas y municiones que los cazadores deben portar, la duración de la competición, las especies a cazar y el desarrollo de la prueba. Y todo cazador que no cumpla con estos requisitos puede ser sancionado o eliminado. 

Cada año se desarrolla el campeonato de cazadores deportivos, tipo de prueba similar al campeonato nacional de caza menor con perro, en el que la diferencia es reunir y juntar a la elite de la caza en España, con el objetivo de que se disfrute de una jornada cinegética sin importar la competición y el resultado final.

Los corzos están viviendo una expansión natural por nuestra orografía, se ha convertido en una especie emblemática de nuestra península. Estos pequeños ungulados levantan pasiones, dándole significado completamente diferente al mes de abril para muchos cazadores, cuando habitualmente se abre la temporada de su caza. 

Cada vez es más importante contar con una adecuada planificación cinegética que permita gestionar de forma óptima el corzo, con el objetivo de mantener las poblaciones y sobre todo, favorecer la presencia de trofeos de calidad. 

Si ejercemos una presión cinegética en los meses de su caza, en poblaciones donde la calidad no ha alcanzado aún todo su potencial, eliminando los mejores trofeos cuando aún no han llegado a reproducirse, estaremos provocando un efecto muy negativo sobre las futuras generaciones en ese territorio. Por ello, en aquellos lugares en las que las poblaciones de corzo aún son jóvenes o poco consolidadas, debemos ser especialmente cuidadosos con los animales a abatir y tener siempre en cuenta que nuestros actos de hoy tendrán reflejo mañana.