Al hilo de la guerra en Ucrania, Elena Mellado, de la Asociación Extremeña de Comunicación Social (AECOS) repasa otros conflictos que siguen activos en todo el mundo.
Todos ellos, señala, "merecen atención, ayuda, apoyo y soluciones"
Al hilo de la guerra en Ucrania, Elena Mellado, de la Asociación Extremeña de Comunicación Social (AECOS) repasa otros conflictos que siguen activos en todo el mundo.
Todos ellos, señala, "merecen atención, ayuda, apoyo y soluciones"
La variedad de ecosistemas existentes en la reserva Natural propicia la abundancia y diversidad faunística. Desde el valle hasta las cumbres serranas encontramos multitud de hábitats que han sido aprovechados por un sinfín de especies animales adaptadas a ellos. De los mamíferos, merecen especial mención la cabra montés, únicamente presente en la región en las cumbres de Gredos. Habita entre los piornales, cervunales y cumbres, aunque las nieves invernales hacen que descienda hasta los protectores bosques, su periodo de celo es noviembre-diciembre.
La Garganta de los Infiernos fue declarada Reserva Natural en 1994. Un espacio protegido de 6927 hectáreas que representa la esencia del paisaje de montaña saturado de bosques y torrentes cincelados por el tiempo. Un lugar que acoge especies en peligro de extinción que se acoplan a alturas que van desde los 600 metros (su cota más baja) a los 2342. Un paisaje cosido y esculpido en agua con marmitas de gigante y como resultado la naturaleza más creativa.
Escucha las últimas noticias de Extremadura y todo lo que sucede en la región a través de los boletines informativos de Canal Extremadura.
Las codornices se cazan entre los rastrojos de cereal (trigo, cebada o centeno), aunque también pueden ser localizadas en terrenos de riego en los que se cultivan plantas como el algodón y la alfalfa.
Las codornices pasan el día refugiadas de la calor junto a arroyos y otros lugares que les proporcionan sombra y tranquilidad. Salen al atardecer en dirección a los cultivos para comer y regresan a su zona a la salida del sol. Por ello, la mejor hora para su caza es al amanecer, hasta que el sol comienza a calentar o al atardecer, cuando las codornices van a los campos de cultivo.
La caza a rececho del gamo durante la ronca, al igual que la del venado durante la berrea, es una experiencia inigualable, permitiendo que el cazador disfrute de toda la magnitud y belleza de la dehesa, además de la belleza de estos animales. A pesar de que su ronca no es tan intensa como la del venado, son menos propensos a esconderse en el monte, son animales más confiados, moviéndose en grupos mas amplios, lo que hace que no prestemos atención a los detalles que harán poner en alerta al gamo y podamos perderlo.
Este tipo de caza es todo un reto, debido a tener que dedicar muchas horas y esfuerzos para obtener el trofeo seleccionado. Es importante contar con la ayuda de expertos en el terreno y profundos conocedores de la orografía en la que nos movemos para conseguir un rececho exitoso.
En 1943, la revista Metronome le pidió a Duke Ellington que nombrara a los mejores arreglistas y colocó a Will Vodery en primer lugar.
Con José Manuel Corrales.
Seremos testigos de la alternativa de El Chorlo en Villafranca de los Barros. Asistimos a la importante corrida de toros que se celebrará en Fregenal de la Sierra. La vuelta a Extremadura de Emilio de Justo. Nos vamos al campo bravo de la mano de un nuevo mayoral. Conocemos que es el desahijado de los becerros.
Con Juan Bazaga.
Ricardo Iglesias es un apasionado del toro y de su profesión. Cirujano reconocido en el mundo del toro, asiste a muchos festejos taurinos, entre ellos los festejos populares. Ricardo conoce la situación de las enfermerías y sabe de la importancia que tiene que todo esté preparado y en orden, en festejos donde como el nos dice "en cinco minutos pasamos de la fiesta al drama".
En las dehesas, desde que nace el becerro, que tiene ya unos genes y comportamientos especiales, va a ir madurando y cambiando sus hábitos y su imagen durante cuatro años. Ahí aparecen el añojo, el eral, el utrero y el cuatreño, incluso el cinqueño. Son las edades del toro y su desarrollo en la dehesa.