El Cáceres Patrimonio ha puesto fin a su racha negativa de resultados con una agónica victoria ante Melilla (82-80). Un partido muy disputado en todo momento y con un final de sobresalto. Las ventajas han sido mínimas en la mayor parte del encuentro. 

Únicamente en el tercer cuarto, el Melilla logró llevar el marcador a una diferencia de 10 puntos a su favor. Se preveía lo peor en esos momentos para los cacereños pero lograron aumentar su intensidad en la defensa y engancharse de nuevo al duelo.

La emoción ha durado hasta el final. A falta de 11 segundos, el marcador reflejaba victoria de los verdinegros por dos puntos y la posesión era para los visitantes. Pusieron el balón en juego y con una buena penetración a canasta igualaron el marcador.

Restaban 5 segundos y el Cáceres debía realizar su último ataque. Devin Schmidt se apoderó de la bola y consiguió una canasta agónica para darle una victoria sufrida y muy necesaria a los cacereños.

El Cáceres Patrimonio afronta esta tarde a partir de las 19:00 un partido crucial ante un rival directo como Melilla. Un encuentro que fue aplazado en su momento y que corresponde a la undécima jornada de liga.

Los de Roberto Blanco acumulan una muy mala dinámica de resultados. Tal es la situación que hasta el propio técnico ya ha reconocido que les tocará pelear por la permanencia en la segunda fase del campeonato.

Conseguir una victoria sería clave para afrontar esa segunda fase en mejores condiciones pero, sobre todo, para aumentar la confianza de un equipo que no conoce la victoria desde el pasado 15 de diciembre ante Oviedo.

A los cacereños les quedan 5 partidos de esta primera fase, dos de ellos serán en el Multiusos ante rivales directos. El primero será el de esta misma tarde y el segundo, ante Burgos el próximo día 12.