La Genti di Muerti: el cortejo de los muertos en Las Hurdes
Jueves, 16 Octubre 2025

En las noches más silenciosas de Las Hurdes, cuando la niebla se desliza entre los valles y los caminos se vuelven inciertos, algunos aseguran haber visto pasar a la Genti di Muerti.
Dos jinetes de rostro pálido y mirada vacía cabalgan lentamente por los senderos, cubiertos con largas capas que apenas dejan entrever su forma. A veces son una pareja de ancianos; otras, un cortejo entero de sombras. Nadie sabe de dónde vienen, pero todos saben lo que anuncian: la muerte cercana de alguien del lugar.

Cuando un caminante se atreve a preguntar quiénes son, la respuesta siempre es la misma, en un susurro que hiela la sangre:

“Semos la Genti di Muerti…”

Tras pronunciar esas palabras, desaparecen entre el murmullo del viento, dejando tras de sí un olor a humedad, a tierra y a sepulcro.
Los hurdanos aprendieron a temer su paso, pues donde la Genti di Muerti se deja ver, una vida pronto se apaga.

Con el tiempo, esta leyenda se ha convertido en uno de los símbolos más inquietantes del folclore hurdano, una versión extremeña de las antiguas “procesiones de almas” que aparecen también en otras regiones de la península.
Hoy, su recuerdo sigue vivo en las fiestas y representaciones culturales que celebran el misterio y la memoria de un territorio donde lo sobrenatural parece caminar muy cerca de los vivos.