En Lezama no se repitió la hazaña de Irún. El Extremadura, con una alineación y una convocatoria íntegramente de juveniles y canteranos, compitió ante el Bilbao Athletic pero terminó claudicando en la segunda parte. Al descanso se llegó con 0-0 gracias en gran medida a la portentosa actuación del meta Álex Guillén en su debut. El portero del Extremadura en Lezama se mostró muy seguro y protagonizó buenas paradas para mantener a su equipo vivo en el partido.

Tras la reanudación, el filial vasco puso una marcha más y terminó decantando el partido. A la salida de un córner, Aitor Paredes abriría el marcador remachando completamente solo en el segundo palo. Minutos después, Ares transformaría un penalti para el 2-0 y el propio Ares repetiría para el tercero. El Extremadura no le perdió la cara al partido y en los minutos finales buscó el gol del honor. Mulero con un lanzamiento desde la frontal tuvo la más clara pero su remató terminó siendo rechazada por un central a córner.

Con esta derrota el Extremadura cae a la penúltima posición y termina la primera vuelta con 17 puntos. El próximo jueves arrancan los azulgranas la segunda vuelta y lo harán en el Francisco de la Hera contra el Talavera de Víctor Cea.

El Mérida consigue sumar su segunda victoria consecutiva en casa por primera vez en toda la temporada. Aunque el encuentro no fue un camino de rosas para los romanos que vieron como se adelantaba el equipo canario en la primera parte con un gol de Uday de cabeza. 

No comenzaba bien el estreno de Juanma Barrero en el banquillo del estadio Romano José Fouto, que veía como su equipo se marchaba al descanso con derrota en el marcador contra el colista de la categoría. Pero el partido no estaba acabado. En la segunda parte salieron con ganas de sacar el encuentro adelante y lo consiguieron gracias a un gol de Hígor Rocha primero y después de Artiles de penalti. Ese penalti con polémica ya que fue muy protestado por los jugadores del equipo visitante.

Con esta victoria el Mérida se acerca a los puestos de playoff y da un aire de esperanza a una afición que ya ha visto pasar a 3 entrenadores en esta temporada por el banquillo de su equipo.