El Villanovense es el único equipo extremeño de Segunda Federación que consiguió la victoria esta jornada. La consiguió en casa del Mensajero por uno a dos. EL entrenador, Gus, afirmó tras concluir el encuentro que habían sufrido "más de la cuenta" aunque reconoce que "es una gran victoria". Gus destacó el compromiso de todo el equipo. 

El Cacereño no corrió la misma suerte y cayó en el Príncipe Felipe por dos a tres ante la Segoviana y suma cuatro jornadas seguidas perdiendo en su estadio. La afición propinó una sonora pitada tras el encuentro sobre todo hacía el entrenador, Julio Cobos, que afirmó "la afición lo que quiere es ganar y lo demuestra pitando". Además, Cobos continuó diciendo que "jugamos partidos de cuarenta y cinco minutos y el resto de equipos de noventa minutos". 

El Badajoz empató en casa del Getafe a cero. Es la segunda jornada consecutiva que el conjunto pacense mantiene su portería acero. El entrenador Iñaki Alonso se marcó con una sensación "agridulce" y aseguró que les había faltado "el instintito asesino en el área que hemos tenido en otros partidos". 

El Llerenense consiguió un punto en casa del Ursaria tras empatar a cero. Luismi Álvarez, entrenador del conjunto extremeño, aseguró estar "muy contento con su equipo aunque jodido por no haber ganado, lo merecimos". 

El Montijo cayó en casa del líder, Talavera, por dos tantos a cero. El entrenador montijano, Emilio Tienza, explicó que al equipo les falta "suerte de cara al gol". Además, aseguró que en Talavera no se pueden tener cinco ocasiones y "que no vaya una a puerta". 

El Mérida ha vuelto a perder esta semana y ya suma diez jornadas sin ganar, un punto de treinta posibles. Cayó en el Romano por cero a dos ante el San Fernando. El propio entrenador emeritense, Manel Ruano dijo en sala de prensa tras terminar el encuentro que "el primer tiempo es de vergüenza". 

La grada no cayó y se oyeron pitos en el estadio Romano y la destitución de Manel Ruano. 

El entrenador reconocía que "nos hemos equivocado, no ha salido nada". Además, apuntaba que "no hemos sido valientes ni con balón ni sin balón". 

Otra pitada que tuvo que aguantar Ruano fue en el cambio de Sandoval, la afición le recriminó su salida del campo y así se defendía el entrenador "somos lo que demostramos en el campo, no Sandoval"

Los aficionados salían del Romano bastante enfadados y crispados con la situación. 

El domingo a las ocho de la tarde el Mérida vuelve a jugar en casa, esta vez ante el Recreativo de Huelva.