2 Octubre 2023, 17:44
Actualizado 2 Octubre 2023, 17:45

El precio del kilo de la aceituna manzanilla cacereña sigue rozando los costes de producción, en torno a los 1,18 euros de media, de manera que las industrias del norte de Cáceres mantienen este precio general a pesar de las protestas de los olivareros llevadas a cabo hace una semana en Villanueva de la Sierra para pedir un "precio justo" por sus producciones.

El alcalde de la localidad serragatina, Felipe Saúl Calvo, ha señalado que los productores y la industria no se han puesto de acuerdo para aumentar el precio en plena campaña de recogida de aceituna, ya que las industrias saben que los agricultores no tienen otra solución que entregar el producto en un periodo muy concreto o dejarlo en el árbol, con las consecuentes pérdidas para el agricultor.

Villanueva de la Sierra

En esta localidad, la producción aceitunera ronda los 4 o 5 millones de kilos, de los que la mayoría se destina a mesa y no a aceite, porque tiene más valor económico y se intenta recolectar de mesa, pero cuando hay una cosecha grande como este año, alrededor del 20% se dedica a aceite. En el caso de la manzanilla cacereña el rendimiento para aceite es de un 11 a un 15%, o sea que se necesitarían 100 kilos para producir 11 o 15 litros, dependiendo de la producción.

Los precios acordados varían entre 1,18 euros en general a los 1,20 que se ofrecen en el caso de que se cataloguen por calibre, pero en cualquier caso, están muy ajustados a los costes de producción debido al aumento de los precios de los insumos, y en algunos casos se paga el kilo a 1,05 o 1,10 euros.

Saúl ha lamentado que en Sierra de Gata "no hay una gran unión entre los agricultores para defender el producto, como ocurre en otras zonas del país", y el precio reivindicado de 1,18 euros el kilo deja "un poquito de beneficio, pero muy poco".

"La gente que se dedica a comprar son pocos y se organizan bastante bien en contra del agricultor", ha señalado el alcalde, que ha indicado que aunque esta práctica se denuncia por la ley de competencia "no hay resultados prácticos" a la hora de conseguir un aumento del precio de compra.

"El comprador sabe perfectamente el plazo que tienen los olivareros para coger sus aceitunas y a medida que van pasando los días van bajando el precio", ha señalado el regidor que ha añadido que "se juega con esa circunstancia" y, al final del periodo de recogida que dura unos dos meses, "compran prácticamente al precio que quieren".

Con estos precios bajos y el escaso rendimiento que la variedad de manzanilla cacereña tiene para el aceite en la comarca de Sierra de Gata se están introduciendo otras variedades en plantaciones de intensivo, que tienen riego y escasa mano de obra, que puede hacer "peligrar" la variedad autóctona de la zona que ha sido merecedora de una Denominación de Origen Protegida Aceite Gata-Hurdes.