Más de 300 antiguos alumnos del Colegio Santo Ángel de Badajoz están de fiesta. Han vivido un reencuentro muy especial y emotivo. Han vuelto a su colegio, la que fue su casa durante muchos años, a sus aulas y, sobre todo, han vuelto a ver a sus amigos.
Han pasado los años, ya no son los niños vestidos de uniforme que llegaban en el día a día a cumplir sus deberes de educarse y formarse como hombres y mujeres. Hoy hablamos de padres, madres, abuelos y en definitiva de excompañeros. La emoción de volver a juntarse, después de varias décadas, constituye un momento de nostalgia único e irrepetible.