10 Diciembre 2025, 13:00
Actualizado 10 Diciembre 2025, 14:57

La Junta de Extremadura mantiene una apuesta clara para frenar la despoblación a través del empleo. Una de sus medidas más destacadas es el programa Nómadas Digitales, que incentiva a quienes teletrabajan para que se instalen en localidades de menos de 10.000 habitantes.

Desde su puesta en marcha, la Junta ha recibido 670 solicitudes y ya son 318 los beneficiarios, de los que actualmente 120 están asentados en la provincia de Cáceres y 84 en la de Badajoz. La mayoría procede de otras regiones españolas, pero también llegan desde países europeos, de América e incluso de Asia.

Es el caso de Aarón y Rong, una pareja que decidió cambiar Madrid por Navalvillar de Ibor, en pleno entorno natural. “A nosotros nos encanta combinar el trabajo y la profesión con el tiempo libre, poder hacer senderismo, vivir en un lugar donde se respire aire limpio, que podamos tener mucha tranquilidad”, explica Aarón Gómez.

Ambos trabajan a distancia y se dedican a exportar productos locales extremeños a nivel internacional. “Exporto cerdo congelado de España a China, y también jamón ibérico”, detalla Rong Ma.

Ayudas e integración

Además del nuevo estilo de vida, han encontrado una ayuda económica de hasta 10.000 euros, que facilita la llegada y el asentamiento de familias. “Hemos vivido en zona urbana, sabemos lo que hay. Hemos decidido dar un paso a un lugar más rural, buscando calidad de vida, con más libertad”, asegura Aarón.

La integración ha sido rápida. A pesar de los idiomas, la acogida ha sido cálida. “Aunque yo no hablo español fluido, ellos siempre me hablan, me escuchan y ayudan”, comenta Rong.