La avenida Martín Palomino de Plasencia vuelve a aparecer en los Presupuestos de Extremadura con una partida de 14 millones de euros destinada a su remodelación. Pero no es la primera vez. La actuación, prometida durante décadas, sigue siendo una asignatura pendiente en el principal acceso a la ciudad, donde el tráfico de camiones, coches y peatones convierte cada jornada en un ejercicio de paciencia.
A pie de calle, los vecinos se muestran escépticos ante el nuevo anuncio. La falta de aparcamientos, la escasa seguridad para los peatones y la desorganización del tráfico son las principales quejas. El proyecto busca hacer más humano el acceso a la ciudad, con aceras más amplias y una mejor ordenación del tráfico. En el Ayuntamiento confían en que las obras comiencen en el plazo de un año, aunque en la avenida Martín Palomino, donde la paciencia se ha vuelto costumbre, muchos prefieren esperar a ver las máquinas en marcha.