24 Mayo 2024, 12:27
Actualizado 24 Mayo 2024, 12:27

Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes a la Intervención de Armas y Explosivos de la Comandancia de Cáceres, han destruido 1.000 armas que, por diferentes motivos, se encontraban depositadas tras diferentes intervenciones de Armas y Explosivos de la provincia.

Las armas destruidas, con un peso de 2,6 toneladas (2.680 kilogramos), fueron mayoritariamente escopetas, aunque también había, en menor medida, rifles, carabinas, pistolas, revólveres, armas de aire comprimido, detonadoras, armas blancas y de otros tipos, según ha informado en nota de prensa el cuerpo este viernes.

Entre las armas reducidas a chatarra se encuentran las de propiedad particular, cuyos dueños han solicitado su destrucción, aquellas cuya eliminación ha sido decretada por la Autoridad judicial o administrativa, las depositadas a disposición de particulares una vez transcurrido el plazo máximo de depósito, así como las incluidas como prohibidas por carecer de marcas, números o punzones obligatorios de un banco oficial de pruebas.

DESTRUCCIÓN DE ARMAS

El número de armas destruidas en la Comandancia de Cáceres se ha incrementado progresivamente durante los últimos años, de manera que, en el periodo histórico de 2007 a 2024, se han destruido cerca de 12.000 armas.

El proceso de destrucción se ha llevado a cabo bajo un "estricto control" en el cual los agentes trasladaron las armas a una empresa de fundición de acero para convertirlas en chatarra.