La reforma laboral, que busca, entre otros objetivos, reducir la temporalidad, es para los sindicatos del sector sanitario, "una oportunidad" para acabar con los contratos de corta duración en el Servicio Extremeño de Salud (SES).
El portavoz del Sindicato de Enfermería (Satse) en Extremadura, Gonzalo Gallego, ha expresado que siempre se ha defendido la necesidad de contratos de una mayor duración en la sanidad regional para cubrir todas las eventualidades que se producen, de ahí que ahora “se abra una oportunidad”.
Con ello se lograría “consolidar al personal sanitario”, ya que muchos profesionales de enfermería o fisioterapia se han marchado a otras comunidades o países donde los contratos son más favorables, lo que conlleva que la administración no encuentre después personal para afrontar las sustituciones.
Ha recordado que en enfermería se dan casos de contrataciones por días sueltos o por escasas jornadas en un centro de salud y poco después en otro centro ubicado, a lo mejor, a 50 kilómetros de distancia de aquél, situaciones muy habituales “sobre todo en el periodo navideño”.
El responsable del área de UGT Extremadura, Felipe Bachiller, ha afirmado, por su parte, que la reducción de la temporalidad es uno de los aspectos de la nueva reforma laboral que más afectará a las administraciones públicas, pues deberán adaptarse al hecho de que “no podrán afrontar contratos por escasos días”.
A su juicio, “independientemente" de que se produzcan contratos temporales, al menos "se abrirá una puerta para el final de la contratación de este tipo de baja calidad”.
Los sindicatos están ahora a la espera de la adaptación de la normativa regional a los cambios aprobados en el Congreso y los representantes sindicales han coincidido en que durante las próximas reuniones con el Ejecutivo autonómico siempre se pondrá sobre la mesa la idoneidad de afrontar estos cambios.
