Badajoz
9 Marzo 2021, 16:17
Actualizado 9 Marzo 2021, 16:20

El  azud del Guadiana, y toda su riqueza como Zona de Especial Protección de Aves (ZEPA); el entorno de San Isidro, en plena dehesa; el curso del río Gévora, el camino hasta la ermita de Bótoa... Son sólo algunos de los parajes que se incluyen en Badajoz, historia y naturaleza.

Se trata de una nueva iniciativa de la concejalía de Turismo que ha diseñado siete rutas senderistas, por las afueras de la ciudad, para descubrir la riqueza natural y patrimonial del término municipal. Rutas, para hacer a pie o en bicicleta, y que, según el concejal del área, Jaime Mejías, sorprenderán no sólo a los turistas, sino también a muchos pacenses.

Tu móvil, tu guía

Las siete rutas ya se pueden encontrar en la web Turismo Badajoz, donde hay información sobre el recorrido o lo que se puede encontrar en él, pero lo más interesante, según el concejal, es que se puede mantener información en tiempo real, a través de nuestros teléfonos móviles mientras se realiza la ruta. "A través de Google Maps, tú vas desarrollando la ruta y puedes ir informándote sobre todos los hitos y lugares interesantes que vas recorriendo a tu paso".

El recorrido de las rutas está entre los 10 y los 25 kilómetros, con un tiempo aproximado de entre dos y cinco horas. Las más largas se recomienda hacerlas en bicicleta. "Una opción muy buena, ahora que viene el buen tiempo y que estamos en pandemia, por lo que es muy recomendable dedicar el ocio a actividades al aire libre".

Rutas

La primera ruta es la del azud y Telena por el río. 15 kilómetros en las que se destaca la Zona Especial de Protección de Aves, Zepa, y el fuerte de Telena, una fortificación del siglo XVII ya desaparecida. En la segunda, se propone una ruta de 10,5 kilómetros por la dehesa, en concreto San Isidro. Y la tercera es la de Cerro del Viento, Maloscaminos y puentes, con 17,4 kilómetros importantes en la historia de la ciudad, por ejemplo, donde estuvo la línea de ataque francesa en 1811.

La cuarta abarca desde Las Vaguadas a La Cocosa, es la más larga con 25,5 kilómetros. La ruta quinta, de 10 kilómetros, discurre por el río Gévora y el puente de Cantillana, de Gaspar Méndez. La ruta 6 discurre por la margen izquierda, las Crispitas y el yacimiento calcolítico del Lobo, a lo largo de 12 kilómetros. Y la 7, de 18 kilómetros, es el camino hasta la ermita de la Virgen de Bótoa.