
Ecologistas en Acción de Extremadura ha acusado a la Junta de Extremadura de convertir la normativa ambiental en chivo expiatorio de los incendios forestales. Dicen desde la organización que el ejecutivo regional trata de tapar de este modo su dejación de funciones e incompetencia. Denuncian además que se haya aprovechado esta tragedia como un arma de confrontación política y que la Junta es rehén de los intereses cinegéticos y la patronal agraria
En una nota de prensa, Ecologistas en Acción señala que Extremadura estaba advertida de que las condiciones meteorológicas del verano serían "muy favorables para la generación e intensificación de incendios", debido al fuerte crecimiento de pastizales que, combinados con el viento, se convierten en "un vector de propagación imparable", y pese a ello la Junta "no adoptó en mayo medidas excepcionales en la orden de peligro alto por incendios, ni la modificó después para reforzar la prevención y la inspección".
La organización subraya que la prevención no consiste únicamente en trabajos de limpieza forestal, sino que también incluyen educación ambiental, inspecciones rigurosas y sanciones efectivas. Sin embargo, la Junta carece, aseguran, de un "verdadero plan" de inspecciones para comprobar el cumplimiento de las medidas obligatorias en montes, terrenos rústicos y zonas periurbanas.