22 Noviembre 2023, 12:15
Actualizado 22 Noviembre 2023, 12:15

El Parlamento Europeo vota la propuesta de reducir un 50% el uso de productos fitosanitarios en los campos de aquí al año 2030.

Las organizaciones agrarias se oponen a esta medida hasta que no haya una alternativa, pues si no se utilizan esos productos no se pueden controlar las plagas y se resiente la productividad. Si prospera esa propuesta de reducción de productos químicos, Apag Extremadura Asaja, se plantearía convocar actos reivindicativos. 

La decisión que adopte el Parlamento Europeo será la que tenga en cuenta el Consejo Europeo a la hora de decidir su estrategia de aquí al final de la actual década. Según esa propuesta, los Estados miembros contarían con cierta flexibilidad a la hora de fijar ese objetivo.

Para proteger la biodiversidad, la propuesta prohibiría el uso de todos los productos fitosanitarios en ámbitos específicos y sensibles.La propuesta de Reglamento busca reforzar los requisitos sobre la gestión integrada de plagas, con normas para cultivos específicos obligatorias y el mantenimiento de registros por parte de los usuarios profesionales sobre las medidas adoptadas.  También tiene por objeto reforzar las obligaciones de seguimiento e información.

El informe, aprobado el 24 de octubre de 2023 por la Comisión ENVI, apoya una reducción a escala de la UE de, al menos, un 50% del uso y el riesgo de los productos fitosanitarios químicos y eleva al 65% el objetivo de reducción del uso de los más peligrosos de aquí a 2030. Amplía el período de referencia para calcular los avances hacia estos objetivos.  

A finales de 2025, la Comisión tendría que examinar las diferencias entre los productos agrícolas y agroalimentarios importados y los producidos en el mercado nacional en lo que respecta al uso de productos fitosanitarios y proponer, en caso necesario, medidas legislativas para garantizar que las importaciones cumplen normas equivalentes.

En principio, se prohibiría la exportación de sustancias activas y productos fitosanitarios no aprobados en la UE.