La reforma de la PAC, que deberá entrar en vigor en 2023, será "más estricta con el cuidado del medio ambiente", del que dependerá el cobro de casi una cuarta parte de las ayudas. Una nueva Política Agraria Comunitaria que incluye más novedades, como una ayuda adicional que prima las primeras hectáreas o cabezas de ganado, que "la puede hacer más justa y social", según Ignacio Huertas, el secretario regional de la Organización Agraria, UPA-UCE.
Por lo demás, Huertas confía "que el dinero de la futura PAC llegue a los agricultores y ganaderos que viven de este trabajo". Por eso, asegura, no le preocupa tanto la cantidad que llegará a la región, que aún no se sabe, como sus destinatarios. De poco le sirve a Extremadura "que el dinero vaya a la cuenta de uno que vive en la Calle Serrano de Madrid"
Por último, recuerda que con la PAC actual el 0,4 por ciento de los perceptores de las ayudas se llevan el 11 por ciento del presupuesto; mientras, el 58 por ciento no llega a los 5.000 euros por explotación. Y valora positivamente que Extremadura haya conseguido mantener las ayudas a los tabaqueros.
