9 Julio 2022, 13:27
Actualizado 9 Julio 2022, 13:27

La mina de Wolframio La Parrilla de Almoharín lleva sin actividad desde el pasado mes de mayocuando su propietaria, la empresa W Resources, presentó un ERTE que afectó a 80 de sus 131 trabajadores.

Entonces la compañía británica alegó problemas económicos derivados del encarecimiento del gas ocurrido a raíz de la guerra de Ucrania. Sin embargo, Jorge Escobar, uno de los miembros del Comité de Empresa, asegura que los problemas financieros venían de antes, y recuerda que la actividad en el yacimiento se ha interrumpido tres veces desde 2014. Este trabajador no encuentra otra explicación, "en el yacimiento hay material y la explotación funciona, yo creo que, por lo que sea, los inversores no les dan más dinero, y deben a muchos proveedores". 

Por su parte, el presidente del Comité, Gonzalo Moreno, cree que la empresa no va a lograr más financiación por parte de Black Rock, una de las firmas de capital riesgo más grandes del mundo, hasta que no tenga no tenga todos los permisos en regla, "algo que ahora no sucede". 

 

Una multa de 60 mil euros por realizar obras sin los permisos ambientales 

Precisamente la Junta de Extremadura acaba de imponer una sanción de 60 mil euros por realizar importantes modificaciones en el yacimiento, una planta de beneficio y una balsa de lodos, sin contar con los pertinentes permisos ambientales. El director general de Industria, Energía y  Minas, Samuel Ruiz, explicaba este viernes en la Asamblea que "la Junta ha cumplido con su labor al garantizar la seguridad minera y medioambiental". 

No lo ven igual Partido Popular, Ciudadanos y Unidas Podemos que en la Comisión de Transmisión Energética del Parlamento extremeño han criticado al Gobierno autonómico por no haber controlado más a una empresa que en 2018 recibió 5,3 millones en ayudas para que reabriera esta mina, uno de los yacimientos de wolframio más grandes de Europa, para que, a día de hoy, la actividad esté parada después de haber hecho modificaciones sin permiso.    
 
Ruiz ha explicado que hasta que esa modificaciones no reciban las autorizaciones ambientales requeridas, no se podrán utilizar y, por lo tanto, según la visión que tienen los trabajadores, la actividad en la mina no se podrá reanudar.  

Preguntada por esta redacción, la empresa W Resources no ha querido hacer comentarios sobre la actual situación de La Parrilla que, de momento, sigue sin fecha de reapertura.