Fibra óptica
Son 82 los ayuntamientos extremeños de menos de 5.000 habitantes que podrán beneficiarse de las ayudas para el despliegue de fibra óptica que impulsa la Junta de Extremadura. La ejecución de los proyectos aprobados prevé el despliegue de unos 111 kilómetros de cable de fibra óptica y la conexión por medio del mismo de 355 nuevas sedes municipales repartidas por los cascos urbanos de los ayuntamientos beneficiarios. El importe de las subvenciones concedidas suma 1.490.502 euros.
Los posibles beneficiarios son 34 municipios de la provincia de Cáceres y 48 de la de Badajoz, como puede ser Cordobilla de Lácara. Desde esa localidad su alcalde, Angel Serván nos cuenta que aunque otra subvención logró los cuadros de la fibra para el municipio aun falta la instalación del tendido, por lo que siguen sin ese servicio. Serván reflexiona sobre la importancia que tiene para un pueblo contar con fibra óptica: "En pandemia hemos comprobado la importancia que tiene. Todo lo que sea mejorar la comunicación es esencial para los pueblos".
"Hace años nos peleábamos por tener buenas infraestructuras de carreteras y ahora lo que queremos son buenas infraestructuras tecnológicas, que en este momento es la fibra".
En el Ayuntamiento de Nuñomoral aun no conocían esta línea de ayudas, pero las observan con interés. En la localidad y en sus 11 alquerías ya se ha instalad la fibra óptica, pero no llega a todas las zonas del municipio ni alquerías. Lo confirma el trabajador municipal, Jesús Domínguez: "En Rubiacos solo tienen acceso los vecinos que están pegando a la carretera, al resto les han dicho que no tienen posibilidades. Les ha pasado igual a los vecinos que viven lejos de la travesía de Nuñomoral".
"Las carreteras del futuro"
Donde sí que ha llegado la fibra en su totalidad es a todas las alquerías que dependen de Pinofranqueado. Algunas no tienen más de 20 vecinos empadronados y no pasa de los 7 habitantes.
Una subvención del ministerio y otra de la Junta de Extremadura hilvanó el mapa al que el alcalde de Pinofranqueado, José Luis Azabal, se refiere como "las carreteras del futuro": "Hace años nos peleábamos por tener buenas infraestructuras de carreteras y ahora lo que queremos son buenas infraestructuras tecnológicas, que en este momento es la fibra".
En poco tiempo, según reseña el alcalde de Pinofranqueado, han notado mucho el cambio que la llegada de la fibra óptica ha provocado en la zona: "Hay gente que trabajaba en Madrid y va a quedarse a vivir aquí. Por ejemplo hay un chico que trabajaba en Marruecos y se está haciendo una casa para vivir en Robledo. También hay unos chicos que son ingenieros y trabajan desde casa. Van a quedarse todo el año viviendo en las Hurdes y trabajando con la fibra. Hay varios casos así".
Azabal se siente satisfecho del cambio que ha supuesto la llegada de la fibra a sus alquerías. Traslada que aun tienen pendiente mejorar la cobertura móvil de Horcajo y Avellanar, sobre todo pensando en los efectos que esto tiene sobre el turismo rural: "Es una reivindicación que hacía perder muchos clientes, la conectividad. Hoy día, cualquier familia con hijos que acude a pasar un fin de semana fuera lo primero por lo que pregunta es si hay internet. Si hay, no hay problema. Si no lo hay, se plantean no reservar".
