6 Abril 2021, 16:19
Actualizado 6 Abril 2021, 16:43

Los profesionales sanitarios de la región se están enfrentando al reto de vacunar a toda la población en un tiempo récord. La logística está organizada para distribuir en las 8 áreas de salud las vacunas de Pfizer, Moderna y Astrazeneca y más adelante también llegarán viales de Janssen. Cada vacuna tiene sus requisitos de mantenimiento y control de temperatura. La más complicada de conservar es la de Pfizer que debe administrarse en un plazo de 5 días y mantenerse entre 2 y 8 grados. Estrella Burgos, responsable de gestión y control de vacunas del área de salud de Mérida, explica que hay termómetros controlando cada minuto la cadena de frio en las cámaras para garantizar la seguridad y se traza minuciosamente todo el proceso de la vacuna hasta que se administra: 

"La población debe estar tranquila, sabemos perfectamente que lote de caducidad tiene cada dosis y a que temperatura está cuando se pone a cada persona".

 

Transporte secreto de las vacunas

Todo está preparado para recibir 200.000 vacunas en abril y aumentar el ritmo en las próximas semanas. Pero hasta que llegan a Extremadura hacen un viaje secreto en camiones geolocalizados desde las compañías farmacéuticas hasta los centros sanitarios de toda Europa. Este control lo realizan las empresas de distribución que contratan seguros ante posibles incidentes. Para gestionar estas coberturas trabaja la correduría de Zafra, Jorge Sánchez Castañón

" Las rutas establecidas por las farmacéuticas junto con la Unión Europea y las Comunidades autónomas son totalmente confidenciales, con camiones de gran tonelaje y geolocalizados por si hay alguna incidencia en el medio de transporte".

Un camino secreto que las vacunas hacen camufladas con otros productos...desde comida a ropa o electrodomésticos. 

"Para pasar desapercibida y no llamar la atención por si hubiera cualquier tipo de accidente se decidió trasladar grandes lotes de vacunas junto con otras mercancias...y pueden ir mezcladas con cualquier bien consumible sea productos perecederos, no perecederos, textil, electrónico...podemos cruzarnos con estos camiones en cualquier carretera y no somos consciente de que van vacunas en ellos". 

Destrucción de vacunas, en caso de incidentes 

Esta correduría tiene que intervenir en caso de accidentes, como rotura de la cadena del frío, avería o algo que está sucediendo, la entrada de inmigrantes en los camiones para acceder a España:

" Ha habido camiones en los que han entrado polizones y se han tenido que destruir las vacunas". 

Si hay algún problema las vacunas se tienen que destruir por seguridad. También por seguridad, el SES custodia en cámaras frigoríficas las segundas dosis para garantizar la inmunidad correcta en la población extremeña.