El Ayuntamiento de Plasencia y la UTE Aguas de Plasencia han confirmado el restablecimiento del Nivel 0 – Situación Normal (Vigilancia Ordinaria) en la calidad del agua abastecida en la ciudad. Los últimos análisis verifican que el agua distribuida cumple con los parámetros del Real Decreto 03/2023 y la normativa vigente, por lo que el agua vuelve a ser apta para el consumo. 

Según ha explicado el ayuntamiento en un comunicado, el pasado 15 de noviembre, la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) detectó un incremento de turbidez y alteración del pH, consecuencia de las intensas lluvias sobre zonas afectadas por los incendios del verano. Este fenómeno obligó a activar el Nivel 1 del Plan de Contingencia para garantizar la seguridad del suministro.

De forma inmediata, añade, la UTE y el Ayuntamiento aplicaron las medidas previstas: intensificación de la vigilancia analítica, ajustes en los procesos de tratamiento y refuerzo del seguimiento técnico. Gracias a esta actuación coordinada, el suministro ha recuperado la normalidad.

Trabajo conjunto

El Ayuntamiento ha destacado la labor de los equipos técnicos de la UTE, que actuaron con rapidez para estabilizar los parámetros, así como la implicación de la concejalía de Medio Ambiente y Gestión Integral del Agua y el gabinete de crisis municipal. También se agradece la colaboración de todas las áreas y entidades que facilitaron información y apoyo durante la incidencia.

La ciudad permanece en vigilancia ordinaria, aunque se continuará monitorizando la situación en los próximos días. Se recomienda a la población consultar únicamente los canales oficiales para evitar la difusión de datos no verificados.

Con la llegada del frío, es habitual recurrir a braseros, estufas o radiadores para mantener el calor en casa. Sin embargo, los expertos insisten en la importancia de usarlos con precaución para evitar sustos, e incluso incendios. La recomendación principal: mantener estos aparatos lejos de cortinas, sofás y otros elementos que puedan arder, especialmente si generan chispas o brasas.

En el caso de las chimeneas, es fundamental limpiarlas antes de encenderlas. “Si no se hace, cualquier aumento de temperatura podría provocar un incendio en el conducto”, advierte José Manuel Guerrero, bombero. Por su parte, Helio Parra, instalador, recuerda que revisar la caldera al menos una vez al año no solo garantiza su buen funcionamiento, sino también la seguridad del hogar, evitando fugas de gas, incendios o explosiones.

Otros consejos básicos: no dejar braseros encendidos sin vigilancia, evitar regletas sobrecargadas y, si se usan braseros de gas, mantener la estancia bien ventilada. Además, contar con elementos como un extintor o un detector de humo puede marcar la diferencia en caso de emergencia.

Tras varios días de abundantes lluvias, Extremadura afronta un cambio radical en el tiempo. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) advierte de un descenso acusado de las temperaturas, con valores más propios del invierno.

La borrasca que nos ha acompañado empieza a marcharse y, con su adiós, llega el frío: toca cambiar el paraguas por el abrigo y la bufanda.

Las temperaturas empiezan a bajar y se notará. Las noches serán más frescas y el ambiente más frío en general, así que conviene tener a mano la ropa de invierno. El viento soplará suave, pero no evitará que la sensación sea más propia de diciembre que de noviembre.

Las mínimas oscilarán entre los 8 y 11 grados, con algún punto del suroeste alcanzando los 12. Las máximas perderán algunos grados respecto al domingo, situándose entre los 13 y 16 grados, aunque en las Vegas del Guadiana se podrían rozar los 17-18. En el norte, el termómetro se mantendrá en torno a los 15 grados.

Esta semana se presenta con cambios en la previsión, y es que la borrasca Claudia, que aún se mantiene al noroeste de la península, aunque ya muy debilitada, se va a ir desplazando hacia el sur. Tras ella, van ganando presencia las altas presiones, que además vendrán acompañadas de una importante bajada de temperaturas a mitad de semana.  

Así, este lunes tendremos un tiempo variable. En la primera mitad del día tendremos un cielo más nuboso con lluvias débiles, más probables en la mitad occidental y sur. Unas precipitaciones que se irán desplazando hacia el sur a medida que avance el día. En el tercio norte, estas nubes bajas pueden dejarnos brumas matinales o bancos de niebla. Por la tarde, ganará presencia el sol y nos dejará un final del día con cielo poco nuboso o despejado. 

Y con unas temperaturas que van en descenso, las mínimas ya se quedarán entre los 8 y los 11 grados, aunque puntualmente en el suroeste, las temperaturas mínimas llegarán a los 12 grados. 

En cuanto a las máximas, en general, perderán algún grado con respecto a las de este domingo, y nos moveremos entre los 13 y los 16 grados. Puntualmente en las Vegas del Guadiana alcanzaremos los 17-18 grados. En cambio, en el norte de Extremadura, las temperaturas ganarán entre 1 y 2 grados, y ya rozaremos los 15 grados.  

Y todo con un viento flojo de norte y noroeste. 

La llegada de las lluvias otoñales y las temperaturas suaves han dado inicio a la época dorada para los aficionados a la micología en Extremadura. Montes y dehesas se han convertido en una auténtica despensa natural, con una explosión de variedades que atrae tanto a expertos como a recolectores ocasionales.

Aunque la temporada comienza en septiembre, noviembre concentra la mayor productividad, gracias a la combinación de humedad y ausencia de heladas severas. Entre las especies más apreciadas se encuentran las de alto valor gastronómico, que hacen de esta estación un momento único para disfrutar del campo.

La Sociedad Micológica Extremeña ha programado numerosas actividades de divulgación y estudio en distintas localidades para promover el conocimiento y la conservación de este recurso natural. Sin embargo, las autoridades insisten en la prudencia: la normativa exige permisos para recolectar en áreas reguladas y el conocimiento experto es clave para evitar intoxicaciones.

Los expertos recuerdan que la mejor forma de disfrutar de esta tradición es con respeto al medio ambiente y precaución, para que la riqueza micológica de Extremadura siga siendo un tesoro compartido.

Comienza la cuenta atrás para el Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad, que se celebrará el próximo 22 de diciembre en el Teatro Real de Madrid. En Extremadura, cada persona gastará una media de 70 euros en décimos, una cifra inferior a la media nacional, que alcanza los 76 euros.

En otras comunidades, el gasto varía notablemente: Castilla y León lidera con 121 euros por habitante, mientras que en Melilla desciende hasta los 17 euros.

El sorteo, convertido en tradición y esperanza compartida, pondrá en juego este año más de 2.700 millones de euros en premios, 70 millones más que en la edición anterior. Se han emitido 198 millones de décimos, y el ansiado ‘Gordo’ repartirá 4 millones de euros por serie.

Muchos extremeños siguen fieles a sus números de siempre, mientras otros confían en la suerte del momento. El 22 de diciembre, la ilusión volverá a llenar hogares y calles, en una cita que une a todo el país bajo el mismo deseo: que la fortuna toque a la puerta.

El Gran Teatro de Cáceres se convirtió este sábado en escenario de emociones y memoria colectiva con el concierto de Acetre, uno de los grupos más veteranos y representativos del folk extremeño. La formación presentó su nuevo trabajo, Cantos Veniales, sin olvidar los grandes éxitos que han marcado casi cinco décadas de trayectoria. El público respondió con una ovación que selló una noche para el recuerdo.

Más que música, Acetre ofreció historias. Cada tema fue un relato vivo de la tierra, como explicó el flautista Víctor Asensio: “Suena a raya con Portugal, a mitología, suena a sueños y también a toda una vida, a nuestras raíces”. Letras que nacen de documentos históricos, como la carta entre los alcaldes de Valdefuentes y Sierra de Fuentes, y que se transforman en melodías que conectan pasado y presente.

El director del grupo, José Tomás Sousa, reivindicó la importancia de la música tradicional: “Hay que conocerla, interpretarla, reinterpretarla y también transgredirla. Es un legado histórico y cultural que tenemos y hay que jugar con él”. Con esa filosofía, Acetre recorrió sonidos que evocan pueblos, ferias y costumbres, manteniendo intacta la esencia que les ha convertido en referencia del folk ibérico.

Cantos Veniales es un homenaje a lo perdonable, a lo que no necesita disculpas: la música que nos define. Con casi 50 años de historia, Acetre sigue demostrando que el folk extremeño no solo se escucha, se vive.