Es curioso ver en este módulo de jardinería a personas de entre 18 hasta 60 años, la edad no importa para seguir aprendiendo, tanto de forma teórica como de forma práctica esta especialidad, y ver cómo trabajan, cómo acondicionan el entorno, el mantenimiento, el cuidado para acabar con las plagas o las enfermedades.

Es toda una tradición ribereña que antes de que empiecen los carnavales, los habitantes de este pueblo, agrupados en pandilla, se van al campo para degustar productos típicos de la matanza, así como realizar muñecos de paja con unos atributos sexuales algo marcados... Estas figuras participan en el concurso de compadres y después se queman en la Plaza del pueblo.

Manuel y otros muchos voluntarios pertenecen a la Asociación Canina Extremeña de Búsqueda y Rescate, Asociación dedicada a la búsqueda de personas. Cada uno tiene su trabajo pero en sus ratos libres dedican a entrenar a sus animales para posibles catástrofes naturales y búsqueda de personas. A raíz del terremoto sufrido en Turquía, ponemos en valor la figura de estos superhéroes que han contribuido a encontrar a miles de personas. Pero sin irnos lejos de nuestras fronteras, en Extremadura han participado en la búsqueda de muchas personas desaparecidas como fue Pablo Sierra. Hay desde cachorros hasta perros adultos que ya están más que preparados para actuar, labradores, pastores alemanes…

Maribel y Luis son los primeros y principales precursores del Baile deportivo en la región, fueron quienes consiguieron que esta disciplina fuera considerada como deporte. Son una pareja sentimental y además comparten su pasión por este deporte. No es la única coincidencia, también son profesores de secundaria: Maribel, de Física y Química y Luis, de Matemáticas. Se conocieron en 2005, cada uno tenía una pareja de baile diferente y en una clase de tango, Maribel empezó a enseñar a Luis a bailar este tipo de baile. 

Juanfran es un apasionado de los caballos y cada tarde sale con ellos, Zafiro y Sultán, a pasear y a disfrutar del atardecer extremeño, algo que para él es de lo más normal, para el resto de personas no. Por eso nos invita a contemplar el campo y el atardecer nuestra región a caballo a orillas del río Matachel.

Estamos preocupados. A Juan Ignacio, un amante de los animales, le ha desaparecido una de sus cabras más pequeñas, Bichina. Identificarla es fácil porque tiene cuatro cuernos y es un cruce de razas verata, serrana, retinta y florida; Juan Ignacio hace un llamamiento importante: "Necesito que Bichina vuelva conmigo", además, él mismo pide que quien la tenga, la puede devolver o dejarla en un sitio determinado. Este joven le ha puesto nombres tan curiosos a sus animales como Rogelio, Padre, Pistolero o Bandera.