6 Julio 2025, 16:51
Actualizado 6 Julio 2025, 16:51

Los aplausos a Pedro Sánchez sonaron con fuerza tanto dentro como fuera del Comité Federal del PSOE, pero las reacciones al finalizar evidencian que la crisis interna en el partido aún no está cerrada. El único que alzó la voz contra la dirección socialista fue el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien advirtió: “Si no ofrece salidas y soluciones, obviamente forma parte del problema”.

Sus palabras generaron críticas inmediatas desde el propio partido. La ministra de Ciencia, Diana Morant, le ha replicado: “El señor Page tiene que entender que hay una mayoría muy clara de respaldo a nuestro secretario general”. Por su parte, Patxi López ha subrayado la necesidad de unidad: “Hemos cerrado filas en lo que tenemos como obligación, que es gobernar para la inmensa mayoría de este país”.

Dentro y fuera de Ferraz, Sánchez recibió tanto aplausos como abucheos. Solo la alcaldesa de Palencia, Miriam Andrés Prieto, salió en defensa de García-Page: “He defendido que todos los socialistas tenemos derecho a opinar sin ser pitados ni recriminados por compañeros”.

Críticas de socios y oposición

Mientras tanto, los socios de Gobierno del PSOE siguen pendientes de sus movimientos y exigen más medidas. Desde Sumar, Yolanda Díaz ha sido contundente: “Creo que están en estado de shock y que tienen que tomar medidas. Vuelvo a repetir esto porque si no, el día 9, el señor presidente del Gobierno actuará e intervendrá en nombre del Partido Socialista”.

El miércoles, Pedro Sánchez comparecerá en el Congreso. La oposición no espera nada de su intervención y mantiene sus ataques. La presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ha criticado duramente al jefe del Ejecutivo: “Ayer el líder se pintaba la cara como un indio arapahoe para dar pena, y habla de privilegios… Privilegiado será tu hermano, que no sabe ni dónde tiene la oficina de artes escénicas”.

Por su parte, el líder de Vox, Santiago Abascal, ha asegurado “Sánchez está dispuesto a resistir a cualquier precio y, además, quiere que esa resistencia acabe destruyendo al Partido Socialista”.