3 Julio 2020, 11:56
Actualizado 3 Julio 2020, 11:55

 

Los empresarios extremeños del turismo rural notan con cierto alivio cómo empiezan a llegar a sus establecimientos los primeros viajeros. Además, ya están recibiendo reservas para los meses de julio y agosto. La gran mayoría de sus clientes son de nuestra comunidad y tienen en cuenta si en ese lugar se pueden bañar o no en las piscinas naturales.

Si bien las previsiones eran bastante pesimistas, las llamadas reservando días han ido cambiando ese pronóstico inicial. Juan Manuel Nieto, de la casa rural La Portilla, en Jarandilla de La Vera, reconoce que no se esperaba una respuesta tan positiva.

Difícilmente se salvará el verano

Estas vacaciones muchos extremeños redescubrirán su región, pero también vendrán de otros puntos de España. En La Siberia ha ayudado su reconocimiento en 2019 como Reserva de la Biosfera y los empresarios de esa comarca han aprovechado el confinamiento para prepararse.


Con todo, aunque las expectativas mejoren las bajas previsiones de partida, será muy difícil salvar el verano en estos negocios. Carmen Seija, propietaria del Hotel Rural Villa de Cañamero, razona que ya se ha perdido un mes de esta importante estación. El sector tampoco pudo abrir en Semana Santa y espera que la situación sanitaria les permita funcionar en otoño.