En la dehesa de Manchita nunca hay un día tranquilo y hoy Chabeli y Antonio tienen que cargar la manga para transportarla hacia otra finca, eso sí, bajo las órdenes de Boni. Veremos cómo trabajan en equipo y nos contarán cómo una zorra se ha comido a todas las gallinas.

Hoy Isabel y Lidia asisten a unas clases prácticas para aprender a afilar peines y cuchillas, y qué mejor maestro que su padre para mostrarles la técnica.

Seguimos compartiendo experiencias con los más pequeños de la región, y hoy hemos asistido a una convivencia en la que más de trescientos niños de varios colegios de la zona, están conociendo uno de nuestros pueblos: Salorino. Si acudimos al refranero popular, sabremos que “De tal palo tal astilla” es un dicho que bien se puede aplicar a muchas de las historias que conocemos en este programa, pero en el caso de esta familia el refrán va un poco más allá, porque Carlota y Félix, de solo ocho y seis años de edad, ya siguen a sus padres subidos a una moto. Y otros que comparten pasión son estos dos amigos de Alconchel. José Luís y Álvaro son también compañeros de trabajo, y juntos recorren toda la comarca para atender a los animales. Hoy terminamos hablando de artesanía, concretamente de ganchillo. Y es que Manuela, una vecina de Torre de Miguel Sesmero, es toda una experta en hacer pendientes con esta técnica… aunque su verdadera afición es ayudar a los demás.

Con Isa Casilda.

La subida de las altas temperaturas trae consigo algunos problemas, como el que tienen hoy María y Javi en la Sierra de San Pedro. Una de sus jóvenes terneras tiene una úlcera en el ojo provocada por una espiga, y tienen que curársela con antibiótico. En la dehesa de Manchita nunca hay un día tranquilo y hoy Chabeli y Antonio tienen que cargar la manga para transportarla hacia otra finca, eso sí, bajo las órdenes de Boni. Veremos cómo trabajan en equipo y nos contarán cómo una zorra se ha comido a todas las gallinas. En Don Benito siguen sacando partido a la ordeñadora tras la última paridera. Por último, Isabel y Lidia asisten a unas clases prácticas para aprender a afilar peines y cuchillas, y qué mejor maestro que su padre para mostrarles la técnica

Estos dos veterinarios de Alconchel, gracias a la preparación y el esfuerzo, consiguen atender todo tipo de urgencias en los lugares más recónditos de la zona.

Manuela, una vecina de Torre de Miguel Sesmero es toda una experta en hacer pendientes con la técnica del ganchillo, pero su verdadera afición es ayudar a los demás.

De tal palo tal astilla es un dicho que bien se puede aplicar a muchas de las historias que conocemos en este programa, pero en el caso de esta familia el refrán va un poco más allá, porque Carlota y Félix, de solo ocho y seis años de edad, ya siguen a sus padres subidos a una moto.