
Producción de tomate en Extremadura
La campaña del tomate en Extremadura llega a su fin con un balance negativo: el sector estima pérdidas de hasta 76 millones de euros debido a la caída del rendimiento por hectárea, que ha bajado alrededor de un 10%. Este mal resultado lleva a muchos agricultores a plantearse abandonar el cultivo el próximo año por la falta de rentabilidad.
Las causas de una mala campaña
Las lluvias de primavera retrasaron la siembra, mientras que las altas temperaturas durante la floración y la recolección han afectado de lleno a la producción. Según los cálculos, el rendimiento medio ha sido de 80.000 kilos por hectárea, lo que dejará la cosecha en torno a 1,6 millones de toneladas.
"76 millones de euros de pérdidas para el conjunto del sector productor. Lo que va a ocurrir es que va a haber muchos productores que el año que viene se van a pensar muy mucho el seguir continuando con este cultivo." advierte Ignacio Huertas, secretario general de UPA-UCE. En la misma línea, el presidente de Acopaex, Domingo Fernández, ha destacado que “ha habido agricultores que este año han tenido verdaderos problemas y van a tener problemas económicos. Sobre todo en Vegas Bajas, está peor que Vegas Altas porque allí afectaron las lluvias más".
Pese a la difícil campaña, el sector confía en que la reducción de producción en Italia y China, principales competidores, impulse una recuperación de precios de cara a 2025. “La esperanza es que se recuperen los precios del concentrado, lo que permitiría pagar más a los agricultores”, ha señalado Domingo Fernández.