10 Noviembre 2021, 19:28
Actualizado 10 Noviembre 2021, 19:32

"Nosotros somos detectives de la ciencia", así define su labor el investigador de la Uex Víctor Sánchez, que acaba de ser reconocido con el premio al científico de carrera temprana más sobresaliente 2022 por la Unión Europea de Geociencias, la organización más importante de Ciencias de la Tierra del continente.

Su especialidad es el clima espacial, una disciplina que trata de comprender el comportamiento del sol a lo largo del tiempo. "Nuestra estrella está continuamente radiando partículas y energía pero su intensidad y la forma de hacerlo puede variar mucho". A veces se producen llamativas tormentas, que originan las famosas auroras, pero nuestro astro también experimenta otros cambios más sutiles que aportan gran información sobre su actividad, como sucede con las manchas solares. Sánchez busca el rastro de este tipo de manifestaciones en todo tipo de fuentes históricas.

"El cielo se iluminó con una especie de fuego..."

De esta forma, ha podido descubrir, por ejemplo, una aurora boreal que llegó a ser vista en Extremadura el 1 de noviembre de 1755, "cuentan cómo de madrugada el cielo se iluminó con una especie de fuego, aquello para nuestros antepasados era como una señal del apocalipsis". Tan llamativo fue aquel evento que han encontrado su descripción en fuentes documentales tanto de Cáceres como de Badajoz. Lo último que ha descubierto el grupo de este investigador de la Universidad de Extremadura es la huella de otra importante tormenta solar que tuvo lugar en 1882 y que aparece descrita en unas observaciones meteorológicas realizadas en Valencia del Ventoso.

Con toda esa información los científicos van completando la historia del sol, lo que permite comprender y predecir mejor el comportamiento de nuestra estrella.