La situación ferroviaria de la región se va a complicar en los próximos meses. Entre el 6 de mayo y el 15 de junio Extremadura se quedará sin apenas trenes, los que conectan con Madrid sólo llegarán a Monfragüe o Plasencia; y los de Sevilla a Almendralejo. El resto de los tramos regionales serán por carretera. Son las consecuencias de las obras en las estaciones de Mérida, Aljucén y Cáceres. Los viajeros reciben la noticia con resignación, esperando la mejora de los servicios.
Lo cierto es que el servicio de Renfe se complementará con autobuses y taxis para terminar el trayecto por carretera. Para ello, Renfe ha convocado un concurso para contratar ese servicio por carretera por más de 1 millón de euros. La empresa adjudicataria deberá contar, al menos con 22 autobuses, 4 microbuses y 5 taxis.
De momento, Renfe no ha ofrecido ninguna alternativa para las circulaciones entre Cáceres y Valencia de Alcántara.
Sobre este asunto le han preguntado también a la portavoz del gobierno, Victoria Bazaga, que se muestra comprensiva aunque, asegura, "llueve sobre mojado."
