Casi la totalidad de bares y restaurantes de Extremadura han permanecido cerrados durante el primer día de la fase 1 de la desescalada en las provincias de Cáceres y Badajoz. Según la Asociación de Turismo y Hostelería de Extremadura, sólo el 5% de sus asociados ha retomado la actividad en las condiciones marcadas de seguridad: sólo terrazas y asegurando un mínimo de 2 metros de distancia entre mesas.
En Badajoz, la apertura de veladores ha sido prácticamente testimonial, informan desde la Plataforma de Autónomos Hosteleros de la ciudad. Apuntan a un 95% de cierre por la incertidumbre de, entre otras cosas, no saber cómo pueden ampliar el espacio dedicado a las terrazas para cumplir la distancia de seguridad (máximo de metros, si pueden ocupar plazas de aparcamiento, etc.)
En Cáceres, la apertura de terrazas también ha sido puntual. La Asociación de Hosteleros plantea más diálogo con las administraciones para consensuar medidas más flexibles que las actuales para que los negocios sean rentables. Como en Badajoz, el ayuntamiento ahora les deberá autorizar la ampliación del espacio de las terrazas estudiando caso por caso.
En Mérida, varios bares ya han dado los primeros desayunos durante la mañana cumpliendo los protocolos de seguridad y limitando el tiempo a media hora por mesa.
Mientras, en el entorno rural se estima una apertura de terrazas de un 11%; sin embargo, prácticamente la totalidad de los alojamientos de turismo rural permanecen cerrados, ha señalado la Federación Extremeña de Turismo Rural.
