Críticas de las organizaciones agrarias de la región al acuerdo de los 27, sobre la nueva Política Agraria Común 2023-2027, la PAC. Una norma que por primera vez va a incorporar ecoesquemas para impulsar una agricultura más sostenible y con una perspectiva de género.
La reforma no convence a las organizaciones extremeñas, consideran que no se ajusta a la realidad del campo y el sector.
Requisitos medioambientales excesivos
Desde Apag Extremadura Asaja, señalan que será negativa para el campo y también para los consumidores. Temen un aumento de la burocracia para la solicitud de ayudas y consideran excesivos los requisitos medioambientales. Su presidente Juan Matidieri, cree que "se han cumplido los peores augurios. "El endurecimiento de esos requisitos va a a ser más rígido, va a ser más lesivo y sancionador para el agricultor y el ganadero".
"El endurecimiento de esos requisitos medioambientales, va a a ser más rígido, va a ser más lesivo y sancionador para el agricultor y el ganadero"
Exigencias medioambientales, que desde UPA-UCE Extremadura, consideran no vienen acompañadas de un presupuesto adecuado para llevarlas a cabo y eso, dicen, afectará a la competitividad de las producciones. Creen además, que se debe fijar que papel tendrá Bruselas en las guerras comerciales. Su secretario de agricultura, José Cruz, señala también que "esperábamos más de la norma, para las explotaciones familiares, los pequeños agricultores y el desarrollo rural".
"Esperábamos más de la norma, para las explotaciones familiares, los pequeños agricultores y el desarrollo rural"
Norma alejada de la realidad del campo
Para ASAJA, la nueva PAC no se ajusta a la realidad del sector y la tierra. Según su presidente Ángel García Blanco, con esta norma "los ministros de Agricultura, el Parlamento y la Comisión vienen a confirmar que hay que traerlos para que pisen el campo y vean la realidad, porque con sandías a 6 céntimos, cebollas a 8 céntimos, y encima nos quieren imponer más medidas medioambientales, del campo no va a quedar nada".
"Los ministros de Agricultura, el Parlamento y la Comisión, vienen a confirmar que hay que traerlos a para que pisen el campo y vean la realidad, porque con sandías a 6 céntimos, cebollas a 8 céntimos, y encima nos quieren imponer más medidas medioambientales, del campo no va a quedar nada"
Una opinión que comparten desde COAG Extremadura, que califican la reforma de "verdadero desastre para la agricultura y la ganadería". Su portavoz Juan Moreno, señala que "es un acuerdo político que no se fija en a quien beneficia y a quien perjudica". Apunta que no defiende los intereses legítimos de los agricultores y ganaderos. "A la vez que nos aprueban una reforma exigiendo mucho más, nos cierran acuerdos comerciales con terceros países a los que nos le exige lo mismo que a nosotros".
"A la vez que nos aprueban una reforma exigiendo mucho más, nos cierran acuerdos comerciales con terceros países a los que nos le exige lo mismo que a nosotros"
Hoja de ruta
Tras este acuerdo a nivel europeo, cada país de manera interna, debe acordar la hoja de ruta para su implementación. En el caso de España, se debe fijar con las comunidades. La previsión es que se celebre una sectorial en julio.
Entraría en vigor en enero de 2023. España recibirá más de 47 millones de euros, hasta 2027.
