La lluvia de este mes de marzo empieza a notarse en los embalses extremeños, aunque el incremento es poco significativo. La cuenca del Tajo está al 50,4% de su capacidad, ha subido poco más de un punto en la última semana (49%) y sigue muy por debajo de como estaba hace un año (83%), más de 30 puntos menos.
Más preocupante es la situación en el Guadiana, que no llega al 30% de agua embalsada (29,1%). Sube muy poco en la última semana, menos de un punto porcentual (28,4%), sigue por debajo de hace un año (38%) y lejísimos de la media de la última década (64%).
El embalse de La Serena, el más grande de España, es donde más se nota la preocupante situación de la cuenca del Guadiana que está muy por debajo de la cota a la que ha llegado otros inviernos. Ahora mismo tiene 480 hectómetros cúbicos cuando su capacidad es de 3.219, es decir, está a tan sólo un 15,2%, solo dos décimas más que hace una semana. Muy lejos de embalses como Orellana o García Sola, que están a más del 50%, e incluso de Alange o Cijara, que rondan el 20%. Desde que se construyó en 1990 la capacidad nunca había estado tan baja.
Por otro lado, el embalse de Alcántara, es el que más agua embalsada tiene en estos momentos (1.562 hm3), está al 49% de su capacidad tras sumar 15 esta semana hm3. Es el que en mejor situación se encuentra, de los grandes, porque el embalse de Gabriel y Galán está al 44% y el de Valdecañas al 39%. Del resto, destacan también los embalses de Cedillo, al 96% y el de Torrejón, al 92%.
