24 Noviembre 2025, 13:50
Actualizado 24 Noviembre 2025, 13:50

Tras semanas en las que las lluvias arrastraron las cenizas de los incendios estivales, tiñendo de negro las aguas del norte cacereño, los ríos y gargantas de la zona recuperan su transparencia y belleza habitual. El cambio ya es visible en enclaves emblemáticos como la Garganta Sierra Cabrera, en Segura de Toro; y en Casas del Monte, así como en el río Jerte a su paso por El Torno.

También vuelve el agua limpia en la Garganta de los Papúos, en Jerte, y en la Garganta de Andrés, que divide los términos municipales de Hervás y Aldeanueva del Camino. Otro punto donde se aprecia la recuperación es la Garganta Ancha, en Casas del Monte.

Este regreso a la normalidad supone un alivio para vecinos y visitantes, que durante semanas contemplaron un paisaje marcado por el impacto de los incendios y las lluvias torrenciales. Ahora, las gargantas y ríos vuelven a ser el refugio natural y turístico que caracteriza al norte de Cáceres.