Se están convirtiendo en uno de los regalos más buscados de estas fechas. Y no solo para los más pequeños. Los bebés reborn, muñecos hiperrealistas que imitan con todo detalle a un recién nacido, están causando furor. En Zafra, un taller artesanal se ha especializado en su elaboración, convirtiéndose en el “hospital” donde nacen los bebés más deseados de estas Navidades.
Elena Torres, la artesana detrás del proyecto, cuenta que empezó creando un reborn para su hija y que, poco a poco, el interés de familiares y amigos la llevó a dedicarse por completo a esta labor. En plena campaña navideña, este trabajo artesanal concentra hasta el 75% de las ventas del año.
Bebés para todos
Los perfiles de compradores son variados. Entre los más pequeños, los reborn son percibidos como el juguete perfecto, gracias a su realismo y al cuidado en los detalles. También hay adultos que buscan en ellos un cobijo emocional: parejas que no han podido tener hijos o mujeres que los adquieren para acompañamiento y confort.
Cada muñeco requiere un mes de trabajo artesanal. El precio varía según el material: el vinilo, más económico, ronda los 300 euros, mientras que la silicona, que ofrece un realismo extremo, puede costar entre 390 y 1.000 euros, dependiendo del tamaño y los detalles.
