9 Septiembre 2020, 14:00
Actualizado 9 Septiembre 2020, 14:00

Familiares de usuarios del centro de mayores La Granadilla, en Badajoz, han pedido un cambio en la dirección de este centro, o la dimisión de su responsable, porque el tiempo fijado para visitar a los residentes es inferior al establecido en el Diario Oficial de Extremadura (DOE).

Desde la plataforma de familiares, Cristina Belloso ha afirmado a Efe que tras las reivindicaciones realizadas la semana pasada para poder ver a los familiares se logró que se publicase el pasado lunes el establecimiento de un mínimo de visitas de dos días a la semana, con un máximo de dos horas. Sin embargo, el director de la residencia, Julio García, ha hecho “caso omiso”, pues en vez de permitirse visitas de una hora se han establecido de 15 minutos -aún se desconoce si una o dos veces a la semana-, un tiempo “insuficiente” para poder estar junto a los mayores, según ha afirmado. Además, ha criticado, solo se ha habilitado un espacio para estas visitas.

Todos estos condicionantes hacen que los residentes se planteen si sus familiares “los han abandonado”, ha lamentado Belloso, quien ha expuesto la angustia que supone para ambas partes todas estas decisiones. La plataforma ha pedido al Ejecutivo autonómico que ponga orden en el asunto, pues el director “se limita a decir que decide él” y los familiares no están seguros “de que esto pueda ser así”, además de la “falta de humanidad” que se evidencia.

Los familiares también han criticado que no se haya establecido aún la posibilidad de realizar videollamadas para contactar con los residentes, pese a que las tablet están repartidas a los centros de mayores de la región. “Sí se han podido realizar algunas videollamadas, pero ha sido gracias a que personal de la residencia nos lo ha permitido en secreto a través de móvil”, ha afirmado.

La plataforma ha expresado que desde el inicio de la pandemia “no ha dejado de haber enfrentamientos” con la dirección, con múltiples familiares que “pueden atestiguar distintos contratiempos” con su responsable. Por todo ello se pide la sustitución, o dimisión, del director “por una persona que tenga más capacidad para hacer de intermediario entre los derechos y el bienestar de los residentes y los de los familiares”.