La Asociación de Abogados Cristianos pedirá al Juzgado de Instrucción número 3 de Cáceres nuevas declaraciones de testigos, después de que cinco alcaldes hayan negado este martes ante el juez que la Diputación Provincial presionara a sus ayuntamientos para la retirada de cruces en Cáceres consideradas franquistas, lo que vinculaba a la concesión de subvenciones.
En concreto, la acusación pedirá que se llame, al menos, a los alcaldes de Casar de Cáceres, Villamiel, Hinojal y Garciaz, localidades que o bien han retirado la cruz o están en proceso de hacerlo, además de aportar la asociación más pruebas documentales.
Declaración de cinco alcaldes
El juez de instrucción ha tomado esta mañana declaración como testigos a los alcaldes de Cáceres, Gargüera de la Vera, Brozas, Talaveruela de la Vera y Barrado, tras estimar la Audiencia Provincial el recurso de apelación de Abogados Cristianos contra el archivo de las actuaciones. Todo ello, según el auto, por entender justificada la declaración testifical de los “supuestos destinatarios de esas presiones” para que “arrojaran luz” sobre los hechos puesto que “la instrucción no puede cerrarse sin practicar tales diligencias”,
Los alcaldes han negado las supuestas presiones, “contradiciendo” las pruebas documentales, como sus declaraciones públicas, los requerimientos enviados a los ayuntamientos, las respuestas de estos, los informes de vecinos, el catálogo de vestigios e incluso un bando municipal, en el que consistorio de Gargüera, ha recordado, aseguraba que la cruz se tiene que retirar porque lo ha pedido Diputación. De esta forma, los primeros ediles se han amparado en el cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica para la retirada de vestigios franquistas.
Cruces en Cáceres
Sin embargo, para Abogados Cristianos, las cruces ya están resignificadas y no son vestigios de la dictadura, sino que tienen un significado cristiano, e incluso algunas recogen términos de "concordia y paz” y de “exaltación de los dos bandos”.
Durante las declaraciones, menos de una decena de personas de la plataforma “Salvemos la Cruz” de la capital cacereña, con pancartas en las que se leía “La cruz no se toca”, han rezado un rosario en la puerta principal del juzgado.