20 Noviembre 2025, 16:22
Actualizado 20 Noviembre 2025, 16:22

El consejero delegado de Endesa, José Bogas, ha defendido posponer el cese definitivo de las centrales nucleares españolas, pero ha matizado que esto no significa mantenerlas "sin medidas", sino ajustar el calendario de cierre tras analizar todas las razones técnicas, logísticas y de seguridad que afectan a estas instalaciones.

En este contexto, Bogas ha incidido en que la situación actual obliga a ser "pragmáticos", al advertir que el contexto ha cambiado y que existe "toda una serie de problemas técnicos" que aconsejan estudiar la posibilidad de retrasar o posponer ese cierre, ha aclarado este jueves en el foro 'Megafuturo', organizado por Atresmedia.

El Pleno del Congreso rechazó el pasado 13 de noviembre una enmienda del Senado al proyecto de Ley de Movilidad Sostenible, impulsada por el PP, que suprimía la fecha de cierre definitivo de explotación de Almaraz, Ascó y Cofrentes. Lo hizo con 171 votos a favor, 171 en contra y siete abstenciones.

Bogas ha destacado que la central nuclear de Almaraz es la primera que está prevista para el cese de actividades, con el cierre de un grupo en 2027 y otro en 2028. Sin embargo, ha advertido que parar dos grupos que comparten ubicación en años diferentes "dificulta muchísimo el desmantelamiento". "No hay razón para pararlos en fechas distintas", ha afirmado.

Calendario de cierre

El calendario de cierre nuclear pactado en 2019 entre las empresas y Enresa marca a Almaraz como la primera central en cerrar, entre 2027 y 2028. En octubre, Iberdrola, Endesa y Naturgy presentaron una solicitud "sin condiciones" para prorrogar la vida de la central extremeña tres años, hasta 2030, según informó la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen.

Ahora, el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) tiene que emitir un informe preceptivo sobre si esta prórroga es viable. Aagesen reiteró que el Gobierno mantiene tres líneas rojas: no trasladar costes a los ciudadanos, mantener la seguridad de las centrales y garantizar la seguridad del suministro eléctrico.

Las centrales nucleares de Ascó y Cofrentes serían las siguientes en apagarse según el calendario actual: Cofrentes en 2030 y Ascó entre 2030 y 2032.

Fiscalidad "muy elevada"

Bogas ha criticado que la fiscalidad del sector eléctrico en España es "muy elevada" si se compara con otros países. Desde la firma del protocolo de cierre nuclear en 2019, la fiscalidad aplicada al sector se ha incrementado un 70%.

El directivo ha añadido que 25% de esa carga fiscal corresponde a impuestos autonómicos y que 17% está vinculado a la tasa empresarial para la gestión de residuos nucleares. "Este es un debate que tenemos, sostenemos y mantenemos con el Gobierno", ha concluido.