26 Diciembre 2019, 9:52
Actualizado 14 Enero 2021, 03:15

Extremadura tutela en este momento a 33 menores extranjeros no acompañados. Cuando cumplan la mayoria de edad seguirán siendo extranjeros y para poder seguir residiendo en España necesitarán demostrar que pueden mantenerse por sí mismos, algo que es imposible sin la Tarjeta de Idenficiación de Extranjreos.

La ONG "Voluntarios por otro mundo" denuncia que en un 79% de los casos, las Comunidades Autónomas no logran tramitar a tiempo la documentación que les permita contiuar su estancia legal en España y que gran parte de los menores que han pasado su infancia en España, quedan indocumentados en su salida a la vida adulta. 

Desde la Administracion extremeña nos confirman la dificultad burocrática que conllevan estos trámites.Guadalupe Llera es la Jefa de Servicio de la DG de infancia y familia; "nos está costando muchísimo que el Consulado nos tramiten el pasaporte en los 3 meses marcados. Pedimos mientras tanto el Permiso de Residencia, que se puede ir prorrogando, pero si hay permiso de trabajo y residencia estable".

Sin alguno de estos dos requisitos, a no ser que haya una medida protectora, no se renovaría el permiso de residencia. Pero nada de ello es posible si la persona en cuestion no cuenta con el TIE, una suerte de DNI de los españoles, pero para personas extranjeras.

La Junta de Extremadura nos indica que en la actualidad ya tiene la documentacion en regla de la mitad de los menores extranjeros sin familiares de referencia que tienen a su cargo, 16. Falta la otra mitad. Guadalupe Llera explica los motivos: "Tenemos muchísimos problemas para conseguir la documentación: la burocracia, la lentitud de los Consulados y muchas veces los propios menores tiene a Extremadura como lugar de tránsito".

José Chamizo , desde la ONG "Voluntarios por un mundo mejor",añade un argumento mas: "Está claro que Interior ha pactado con Marruecos ralentizar la entrega de los documentos a los menores, lo cual es un escándalo".

Y no comparte la percepción de la Junta respecto a que los menores no quieran quedarse en la región: "Lo que no quieren es volver, porque ellos vienen para ayudar a sus familias, y volver es un fracaso". Lo reafirma Demba, que llégo a Extremadura con 12 años y estuvo apoyado por la Administracion Extremeña hasta los 21 años: "La mayoría lo que hacemos es trabajar y vivir aquí para ayudar a nuestras familias".

Demba lo hace desde hace 9 años. Trabaja en una fábrica de caramelos. Eso le permite poder renovar su permiso de residencia cuando le toca, ya que aún no tiene la nacionalidad española, y lo más importante para él, envíar ayuda a su familia en Senegal cada mes.

 

TEXTO: Ana Gragera

IMAGEN: Canal Extremadura