17 Noviembre 2023, 11:53
Actualizado 17 Noviembre 2023, 12:01

‘Cambia el Plan’ es la campaña lanzada por la Agencia Española de Protección de Datos y la Asociación Española de Pediatría con el objetivo de promover la salud digital de los menores a través de la concienciación de sus padres y madres. 

En el programa informativo matinal de Canal Extremadura, 'Ahora Extremadura', Mar España Martí, directora de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) ha mostrado su preocupación sobre los efectos negativos que el uso descontrolado de pantallas está teniendo en el desarrollo físico, mental, social y sexual de los menores. Advierte de un "uso intensivo y sin control" que califica como un "riesgo que no se puede evitar".

La directora de la AEPD apunta a la necesidad de un compromiso colectivo necesario para afrontar este problema, que puede derivar en patologías graves como el fracaso escolar, ansiedad y retrasos en el desarrollo. "Esto es cosa de todos," ha enfatizado, llamando a la acción no solo a los padres, sino también a los gobiernos y a la industria.

Tanto la AEPD,  junto con la Asociación Española de Pediatría, ponen en marcha un plan digital familiar. Este plan proporciona, con base en "evidencia científica", recomendaciones sobre las horas máximas que los menores deberían pasar frente a las pantallas. Y es que Mar España apunta a que hay datos que resultan alarmantes: "Uno de cada cuatro adolescentes está ahora mismo medicado con depresivos y medicación contra la ansiedad y esto no puede ser". Insta, además, a las consejerías de educación a revisar el tiempo online en la enseñanza.

Mar España ha relatado situaciones muy graves derivadas del mal uso de la tecnología entre menores, como el caso de los montajes eróticos de menores en Almendralejo. Un hecho que se suma al preocupante incremento del 116 % en delitos sexuales cometidos por menores reportado por la Fiscalía General del Estado. "Y las familias deben saber que lo que hacen sus hijos, ellos responden civil y administrativamente," ha advertido, haciendo hincapié en la responsabilidad legal y las consecuencias devastadoras de estos actos.

La directora de la AEPD resaltó el impacto en el neurodesarrollo de los niños y la pérdida de referencia de igualdad en las relaciones a causa de una educación sexual mediante la pornografía en portales web de adultos. Mar España ha insistido en la importancia de explicar pautas a los padres sobre el uso adecuado de móviles, comparando la entrega de un smartphone sin control a dar "una botella de whisky, un paquete de tabaco con nueve años." Acciones como el retraso en la entrega de móviles o el uso de modelos no inteligentes para menores son recomendadas junto con la constante comunicación y el ejemplo en el hogar, ha aconsejado.

Sobre una posible prohibición legal del acceso a móviles antes de los 16 años, Mar España ha dicho que: "No se puede prohibir por ley que el móvil no llegue a los 16 años", pero sí solicitó a las consejerías pertinentes considerar la prohibición de móviles en las aulas, una medida que en comunidades como Galicia, Madrid y Castilla-La Mancha mostró mejoras en rendimiento escolar y reducción del ciberacoso.

 

Laura Baena, Club de Malas Madres: "Hay realmente una necesidad de educar en el buen uso de la tecnología"

En relación al debate sobre una posible prohibición de los smartphones a menores, Laura Baena, fundadora del Club de Malas Madres, considera que la clave está en un enfoque integral que privilegie la educación digital y no simplemente la prohibición. Baena argumenta que la solución no es coartar el acceso a los dispositivos móviles hasta los 16 años, sino en promover un uso responsable desde edades tempranas. "Hay un sistema, hay una industria y hay realmente una necesidad de educar en el buen uso de la tecnología" ha destacado.

La preocupación por el consumo excesivo de móviles entre los menores es un tema ampliamente tratado en el Club de Malas Madres. Llevan cinco años enfocándose en un uso más consciente de la tecnología, con la colaboración de expertos y proyectos como 'Like', que enfatiza en el rol del acompañamiento parental, más allá del control del tiempo de pantalla.

Baena critica una práctica común de centrarse únicamente en los horarios y no en los contenidos a los que los menores están expuestos. "Hay mucho espacio entre prohibir y entre barra libre de wifi y de contenidos," señala.

Desde el Club de Malas Madres sostienen que el Gobierno debe intervenir, no con prohibiciones, sino regulando aspectos críticos como el acceso a la pornografía infantil y promoviendo la verificación de edad en plataformas digitales. Baena apunta que, además, es esencial dotar de recursos a las familias: "No hay regulación desde los gobiernos... no hay recursos, porque no hay formación", afirma

También evidencia una realidad social preocupante y es que muchos padres facilitan teléfonos móviles a sus hijos para mantener el contacto al salir del instituto, debido a la falta de conciliación entre la vida laboral y familiar. Ante esto, Baena pone en relieve la urgencia de empatizar con las familias y proporcionarles apoyo y educación, en lugar de tratar a los padres como responsables únicos de las prácticas digitales de sus hijos.

Desde el Club de Malas Madres reclaman políticas gubernamentales que faciliten la conciliación y brinden apoyo familiar, con un plan nacional que permita a las madres y padres tiempo para educar, no solo en el buen uso de la tecnología, sino en general. "No eliminar las pantallas, eso no va a servir de nada. Y a nivel de salud mental... estamos a niveles últimos de Europa en el número de psicólogos y psicólogas en España y nuestros niños, nuestras niñas, nuestros adolescentes necesitan ese acompañamiento," considera Laura Baena, marcando otro área de acción prioritaria para el nuevo gobierno.

En 'Ahora Extremadura', Laura Baena propone momentos libres de tecnología dentro del núcleo familiar y destaca el potencial positivo de los videojuegos cuando se usan en un marco regulado.

 

Charlas de la Policía Nacional sobre el uso responsable del móvil

Para concienciar sobre el uso responsable de las nuevas tecnologías, la Policía Nacional está impartiendo charlas a jóvenes en centros escolares. Raquel Tobar, agente al frente de estas ponencias, destaca la importancia de la educación temprana en la materia. "Muchos padres le dan los móviles a los menores sin enseñarles qué reglas tiene el uso de ese móvil" subraya. Las charlas se centran, entre otras cosas, en las consecuencias futuras del contenido compartido en internet.

Con la proliferación de móviles entre menores, usualmente a partir de los diez años, surge un problema latente según Tobar: "La mayoría aprenden por sí mismos o un amigo que les enseña." Frente a este autodidactismo, la agente de Policía recalca la utilidad positiva de las plataformas, pero insistiendo en el buen uso de las mismas.

Los problemas detectados en estas interacciones digitales juveniles no son menores; desde el riesgo de acoso, hasta la interpretación errónea de las interacciones digitales en comparación con el contacto personal. Tobar argumenta que las expresiones ofensivas tienen un contexto diferente en el mundo digital. Esto, a menudo, lleva a malentendidos y conflictos.

Además, Tobar señala la delicada situación del consentimiento en el ámbito sexual dentro del entorno digital, agudizado por el acceso a la pornografía y a series de adolescentes donde el concepto de consentimiento suele estar tergiversado. 

En la entrevista también ha mostrado la preocupación sobre la interacción de menores con adultos a través de redes sociales y cómo las apariencias engañosas pueden conducir a situaciones de riesgo. Con respecto a la implicación del entorno adulto, Tobar indica que se ofrecen también charlas para las familias.

 

Efectos psicológicos en los menores de un uso inadecuado del móvil

Otro de los aspectos relevantes a tratar sobre el exceso de pantallas en menores es su impacto psicológico. Para ello, la psicóloga Carmen Rosado ha puesto el foco en la ausencia de interacción física y social en la vida de los menores, a causa del uso indiscriminado de dispositivos móviles, algo que podría estar contribuyendo a su aislamiento y dificultades emocionales.

"Los niños están muy solos. Los papás están a otras cosas, los profes están a otras cosas," afirma Rosado, destacando el vacío emocional que intentan llenar a través de Internet y los móviles.

La psicóloga ha detallado estadísticas preocupantes del Hospital Sant Joan de Déu, en Barcelona, en la que alertan de un incremento de los episodios de conducta suicida de 250 en 2014 a 1.000 en 2022. Rosado plantea que la relación entre el uso excesivo de pantallas y la pérdida de salud mental "es incontestable", esencialmente entre adolescentes que enfrentan una "sensación de aislamiento, de soledad, de desbordamiento, de emociones que no pueden elaborar con nadie". La especialista sugiere que para enfrentar esta crisis, es crucial el desarrollo en ambientes con más contacto físico y social, apoyando la proposición de restringir el uso del móvil antes de los 16 años. 

Rosado ha remarcado la importancia de conocer el desarrollo evolutivo del niño y enfatiza que el afecto y el ejemplo de los padres son fundamentales para moderar el uso de dispositivos electrónicos entre padres e hijos, poniendo de relieve cómo incluso las interacciones cotidianas, tales como amamantar a un bebé o comer en familia, se ven afectadas por la distracción constante de las pantallas.