20 Junio 2021, 17:10
Actualizado 20 Junio 2021, 17:19

Estamos apurando las últimas horas de la primavera y la estación parece querer despedirse por todo lo alto, con lluvias y con temperaturas más propias de finales del mes de abril. 

Esta próxima madrugada a las 5 horas y 32 minutos daremos la bienvenida al verano. De momento, no llega con el tiempo acorde a la fecha en la que estamos, pero las lluvias tenderán a retirarse en los próximos días y las temperaturas se recuperarán.  

Por delante tendremos 93 días y 15 horas de estación, la más larga del año. Además, el 21 de junio, el día del solsticio de verano, es el de mayor duración, aunque no el día en el que amanece antes y anochece más tarde. El día con el amanecer más madrugador fue el pasado 14 de junio y el día en el que anochezca más tarde será el próximo 27 de junio.  

El próximo 5 de julio tendrá lugar el afelio, el momento del año en el que el Sol y la Tierra se encuentran a mayor distancia. 

¿Cómo ha sido la primavera?

La estación que está a punto de finalizar nos ha dejado grandes contrastes. El balance en Extremadura en cuanto a precipitaciones ha tenido un carácter muy seco, ha llovido solamente un 68% de lo que suele ser habitual teniendo en cuenta el periodo de referencia 1980-2010. Ha sido la sexta primavera más seca de los últimos 41 años. Destacan el mes de marzo y el de mayo con precipitaciones por debajo de las habituales, aunque abril fue considerado un mes húmedo en la región.  

 

Precipitación de la primavera 2020
Precipitación de la primavera 2020. Fuente: AEMET Extremadura.

 

En cuanto a las temperaturas, ha sido una estación muy cálida. La temperatura media ha estado 0,7 grados por encima de la media. Marzo y mayo nos dejaron temperaturas dentro de la normalidad, pero abril resultó un mes muy cálido con una anomalía positiva de 1,4 grados. 

 

Temperatura media de la primavera 2021.Fuente: AEMET Extremadura
Temperatura media de la primavera 2021. Fuente: AEMET Extremadura

 

¿Cómo será el verano?

De momento la nueva estación arranca con un tiempo nada propio del verano, aunque con una tendencia a la estabilidad y a temperaturas cada vez más cálidas. 

Las previsiones estacionales apuntan a que el trimestre julio-agosto-septiembre será más cálido de lo habitual y con precipitaciones inferiores a los valores de referencia. Una tendencia que viene siendo habitual en los últimos años.